¿Un Gato con Asma?

Mascotas, gatos, enfermedades, asma, cuidados.

Mi nombre  es Rodrigo, estoy en sexto de secundaria; me gusta mucho ir al colegio, en especial porque puedo jugar con mis amigos y aprender muchas cosas. Quiero contarles que el mes pasado gané el primer lugar por un trabajo libre de investigación que nos dejaron en la clase de Biología, que por cierto es mi materia favorita, claro que no puedo decir lo mismo de matemáticas. No vayan a creer que fue muy fácil hacerlo, al principio no sabía en qué trabajar, hasta que fuimos a casa de mi tía y empecé a jugar con Botas, su gato Siamés de 5 años. Pero no contaba con que Botas tenía asma, sí como lo oyen, asma, yo tampoco lo creía; pensaba que sólo nos daba a nosotros los humanos. Así que como no entendía mucho, se me vino a la mente investigar sobre este tema y esto fue lo que averigüé:

El Asma Felino es una enfermedad del sistema respiratorio también conocida como Bronquitis felina, bronquitis alérgica o bronquitis eosinofílica, que afecta principalmente a los bronquios haciendo que su pared  muscular se inflame y su diámetro se haga más pequeño (broncoconstricción) y junto con secreciones mucosas, obstruyan el paso del aire; esto hace que el gato no pueda respirar adecuadamente. La causa de este padecimiento no está muy bien definida, sin embargo, se cree que es una reacción alérgica producida por una predisposición genética en combinación de algún factor detonante; como de tipo ambiental (humo, aerosoles, polvo, pesticidas, productos de limpieza, etc.), de tipo infeccioso como bacterias, virus, parásitos y hongos; factores físicos (aire frío)  y los factores estresantes. Esto quiere decir que cuando el gato se ve afectado por alguno de estos factores se genera un proceso de sensibilización (alergia) y se producen los signos clínicos.

La raza más susceptible es la Siamés, y los gatos jóvenes entre 1 y 8 años. Los signos principales son tos y disnea (dificultad respiratoria) y algunas veces encontramos silbido al respirar (sibilancias), expectoración, estornudos, vómitos y disminución en la actividad física. Estos signos pueden presentarse en forma aguda (requiere atención de urgencia), crónica, o estacional (periodo de tiempo específico).

Ahora podía entender por qué Botas cuando venía la época de lluvias o alguien fumaba en casa, empezaba a tener tos. En el caso de Botas no fue fácil el diagnóstico, ya que no hay una prueba específica que nos indique que es asma, así que depende de la experiencia del veterinario; yo averigüé que primero es indispensable descartar otras enfermedades de tipo parasitario, viral o bacteriano para confirmar el asma. Es necesario tomar ciertos estudios como un hemograma (estudio de la sangre) donde el 20% al 75% de los gatos con asma presenta eosinofilia (un tipo de glóbulos blancos que se presentan cuando hay algún tipo de alergia), también hay que tomar una radiografía de tórax para visualizar los bronquios, que suelen estar engrosados. Es fundamental que el gato presente los signos que ya les había comentado (tos y disnea).

No hay una cura para el asma, sólo se puede controlar la signología. En los casos de disnea aguda es indispensable suministrar una terapia de urgencia, que incluye oxígeno, algunos medicamentos llamados broncodilatadores donde su función es permitir que el bronquio se relaje y el diámetro aumente para que el aire pase adecuadamente. Un ambiente tranquilo (sin estrés) es lo más indicado. En los casos crónicos o estacionales la terapia se basa en controlar la inflamación, para lo que se suministran unas sustancias llamadas corticoesteroides por tiempos prolongados. También se pueden usar nebulizadores pediátricos (aparatos eléctricos que transforman los medicamentos líquidos para el asma en un vapor fino o rocío para que lleguen fácilmente a los bronquios), algunos antihistamínicos para controlar la alergia y eliminar en lo posible el factor detonador.

Como se pudieron dar cuenta, éste es un tema muy interesante aunque no es tan fácil de entender, pero si investigan y leen con atención estoy seguro que podrán aprender mucho de una manera divertida; así que prométanme que la próxima vez que no entiendan algo, se van a arriesgar y buscarán la forma de responder sus dudas.

 M.V.Z. Ibeth M. Gaitán Tolosa