¿Por qué te huelen los pies?
Imagina un día caluroso de vacaciones. Has jugado con tus amigos toda la tarde. Llegas a casa, te quitas los zapatos y comienzas a percibir un olor penetrante; es un aroma desagradable del que empiezas a buscar su fuente y, de repente, te das cuenta que ese olor tan peculiar viene de… ¡tus pies!
Son estructuras fuertes, complejas y resistentes que constan de 26 huesos, 32 articulaciones, 19 músculos y más de 100 ligamentos y tendones que en conjunto nos permiten estar de pie, caminar y correr, soportando el peso del cuerpo.
Los pies trabajan sin descanso y, como muchas otras partes del cuerpo, transpiran constantemente. En un solo día, cada pie puede liberar hasta cerca de medio litro de sudor que consiste básicamente en agua y sal. Esta combinación no tiene un olor específico. Entonces, ¿qué hace que huelan tan mal? Puedes culpar a las bacterias: bichos pequeñitos que viven en tu cuerpo donde se alimentan y liberan desechos que tienen un olor muy característico.
Casi todas las partes de nuestro cuerpo transpiran, incluso las manos y la espalda, pero ¿por qué no producen este mal olor? La respuesta es sencilla, estas partes del cuerpo, por lo general, las tenemos ventiladas. Los pies, por el contrario, están encerrados en nuestro calzado donde se forma un ambiente húmedo, cálido y oscuro ¡un perfecto paraíso bacteriano!
Estas condiciones ofrecen un gran banquete a todas las bacterias. Ellas se alimentan de las células de la piel muerta y los aceites. Las colonias de bacterias crecerán y como todo ser vivo empezarán a eliminar productos de desecho en forma de ácidos orgánicos. Son estos ácidos los que huelen tan mal.
El olor de los pies en algunas personas es terrible. Esto es porque cada persona transpira de forma diferente. Hay quienes generan mucho sudor y producen un gran hogar para una bacteria denominada Kytococcus sedentarius. Esta bacteria no sólo produce ácidos orgánicos malolientes, sino también unas sustancias derivadas del azufre que suelen tener un olor muy fuerte. Si alguna vez has olido un huevo podrido, ya sabes cuál es el olor de los compuesto volátiles de sulfuro.
¿Qué puedes hacer para evitar el mal olor? Manten tus pies limpios y secos, cambia de calzado regularmente y usa calcetines de algodón para absorver la transpiración, así ¡las bacterias tendrán que buscar su comida en otro lugar!