Mi gato está estreñido, ¿qué hago?

El gato es un animal considerado como muy limpio ya que gusta de estar siempre bien arreglado debido a su hábito de acicalamiento constante además de que fácilmente se acostumbra a emplear su arenero para orinar y defecar sin necesidad de un entrenamiento previo, a diferencia de los perros. Para mantenerse así, muchas veces los gatos requieren de nuestra ayuda para mantenerse como mascotas limpias, sanas e independientes.

Debido a su acicalamiento, en muchas ocasiones llegan a comerse su pelo al pasar su lengua por el pelaje, pudiendo llegar a formarse en el intestino bolas de pelo conocidas como tricobezoas, las cuales pueden provocar que las heces sean más duras de lo normal y no puedan ser evacuadas de manera habitual, por lo que defecan parcialmente o no logran realizar esta función fisiológica normalmente, provocando molestias físicas conocidas como estreñimiento.

El estreñimiento en gatos también puede ser producido por falta de ejercicio; porque su arenero no se encuentre en un lugar que le agrade, porque sea muy chico o porque la arena no es de su gusto, pero el más importante es porque esté alimentado con alimento bajo en fibra, como el alimento casero. Cualquiera que sea la causa debemos estar conscientes de que los gatos con este padecimiento pueden presentar dolor abdominal, inapetencia, depresión, abdomen duro e inflamado y esfuerzos constantes para evacuar sin lograrlo. En estos casos siempre se deberá acudir al médico veterinario para descartar otros padecimientos más graves que también lo pudieran provocar, como la enfermedad del tracto urinario bajo y la colitis. El tratamiento dependerá de la causa que lo esté produciendo y pueden aplicarse remedios desde muy sencillos hasta la cirugía. Un gato que presente estreñimiento durante un tiempo prolongado sin que se le brinde el tratamiento adecuado puede formar un megacolon (agrandamiento del colon), lo que provoca que las heces no puedan ser evacuadas obligando a que se le dé un tratamiento más severo con dietas más estrictas. Por esto es muy importante que el gato defeque y sólo mantener algunas sencillas medidas profilácticas de manera natural.

Si el estreñimiento es causado porque al gato no le gusta la arena, es recomendable probar con las diferentes marcas disponibles hasta encontrar la que le agrade a nuestra mascota. El tamaño del arenero debe ser adecuado al tamaño del gato y lo ideal es que al menos cuente con dos, que deberán colocarse en lugares tranquilos, fuera del paso normal de los miembros de la familia, para que pueda realizar sus deyecciones de manera confortable y tranquila.

Si la causa es la falta de ejercicio, deberemos proveer a nuestro gato de juegos para que corran con un juguete o se escondan para atraparlo, lo que se considera un enriquecimiento de su entorno, con lo que también evitaremos la obesidad que también puede traer consigo otros problemas de salud.

En el caso de las bolas de pelo, éstas se pueden controlar en primera instancia, sobre todo si son gatos de pelo largo, con el cepillado frecuente para evitar el exceso de pelo muerto, y alimentándolo con alimento Premium o Super Premium, preferentemente seco, el cual contiene una adecuada cantidad de fibra que ayudará a poner a trabajar su intestino, y vigilando que su consumo de agua sea suficiente para evitar el estreñimiento.

Una mascota sana es una mascota feliz.

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